martes, 30 de noviembre de 2010

Con todos ustedes, ¡la Dra. MINSIX!

Se habla mucho, en general, de lo mal que está el mundillo de la investigación; de lo sufrido que es dedicarse a este campo, de las pocas satisfacciones que produce, de lo injusto que es a veces dedicar tanto tiempo y esfuerzo a algo que no se materializa en un beneficio ni económico, ni material (al menos a corto plazo... bueno, económico nunca, la verdad). Sin embargo, hay otros momentos en los que queda constancia de que este trabajo es vocacional, y como todo aquello que se vive con el corazón, puede producir sensaciones gratificantes. Uno de estos momentos, en términos generales, suele ser el de la lectura de la tesis doctoral. Aprovechando la recientísima entrada de nuestra compañera MINSIX al club de los doctores, he decidido escribir unas líneas en torno a este momento que en nuestro país se vive de manera tan intensa como estrafalaria, más parecida a un auténtico bodorrio que un mero trámite académico.

Simbólica representación de la infatigable MINSIX, 
vista a través de la perturbada mente de un servidor.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Vida Extrema II


En la prensa del mes pasado pudimos leer algunas noticias como las que se describen a continuación:
- El estudio genético al que ha sido sometido Ozzy Osbourne (El incombustible príncipe de las tinieblas líder de Black Sabbath), porque nadie se explica porqué este tío, que se ha metido todo lo que un ser humano se puede meter durante 40 años (nació en el 48), está como un toro. Nada que ver bioquímicamente hablando, con Jim Morrison, Kurt Cobain, Janis Joplin y Jimi Hendrix... que a los 10 o 15 capitularon.
-La retirada definitiva del atletismo por lesión de rodilla de Haile Gebreselassie, el hombre mas rápido de la larga distancia Olímpica, con el permiso de Fidípides (Atenas 530 aC–490 AC).
-El estreno de la película “127 hours” (que cuenta la hazaña, locura o dios sabrá cómo llamarla, de Aron Raslton (1975, Indiana), un aventurero que en 2003 decidió ir, solo y sin avisar de su paradero, al Blue John Canyon en Utah y tras un desprendimiento y 5 días sin comida y el agua agotada, decidió liberarse de la roca que lo atrapaba cortándose el brazo con una Navaja Suiza (previa rotura, por palanca, de los huesos que le quedaban íntegros).
Después de leer estas noticias, a mí me surgen preguntas...
¿Que tiene que ver Gebreselassie con Black Sabbath?
¿Se comería Ozzy el brazo de Aron, (ya se comió una paloma viva)?
¿Cuál es límite físico del ser Humano?

viernes, 19 de noviembre de 2010

Paciencia, humor, dolores, por Leda

Tengo el honor de presentaros una contribución especial que nos ha mandado la compañera Leda (cuyo arte pudimos apreciar hace tiempo en esta otra entrada): se trata de una historieta en una página, donde se resumen con magistral sencillez todas las etapas por las que pasamos durante el trance llamado "tesis". 

Sin más dilación, os dejo con el sencillo y elegante trazo de esta genuina cienciartista:



domingo, 14 de noviembre de 2010

Avatares misteriosos (II): Montañas flotantes y mamporros en 3D

En la entrada anterior hablamos de una de las primeras películas que avisaban del peligro de perder nuestra humanidad y nuestro futuro al mismo tiempo que los recursos naturales de nuestro planeta; en el camino, conocimos naves espaciales precursoras de la Nostromo o los antepasados algo más torpones de R2D2 y WALLE. Eran los años 70 y la gente, podemos imaginar, saldría del cine pensando o bien que les acababan de contar una patochada tremendista, o bien corriendo a su casa a plantar un árbol, llenos de remordimientos.

Demos un salto en el tiempo y encontrémonos, de súbito, en una gigantesca sala de cine atiborrada de altavoces, una pantalla de dimensiones increíbles y un patio de butacas lleno de personajes ataviados con ridículas gafas: se apagan las luces, comienza el sonido atronador, y los logos de las productoras salen de la pantalla en un impresionante efecto estereoscópico. En las butacas, podemos encontrar una varipointa colección de individuos (luciendo todos ellos unos incómodos anteojos de dos kilos); aunque algunos parecen sacados de las mismas comunidades hippies que llenarían las salas de exhibixión de Naves Misteriosas treinta años atrás, sus ideales distan de ser los mismos. Aunque todos los presentes en la sala son conscientes del problema que supone la deforestación de grandes zonas del planeta y algo tal vez más grave conocido como "cambio climático", se han desplazado en flamantes automóviles y han comprado antes de entrar una gran cantidad de productos con alto contenido calórico, que además constituirán una gran cantidad de residuos poco reutilizables cuando termine la proyección. Saben que van a ver una película de ciencia ficción, supuestamente una que les va a mostrar algo que nunca  han visto antes. Se llama Avatar, y llega dispuesta a golpear sus sentidos en todas direcciones (x,y,z).

No he podido resistirme a colocar al avatar de Peter Griffin


lunes, 8 de noviembre de 2010

Avatares misteriosos (I): Bosques en peceras y robots de cartón piedra

Esta entrada nace a raíz del visionado de la película Naves misteriosas (Silent Running en su versión original, bastante más sugerente y molón). Pese a no estar a la altura - cinematográficamente hablando - de títulos como 2001: Odisea en el espacio, Alien o Blade Runner (algún día tendré que ponerme a largar sobre estas tres joyas), se suele considerar al mismo nivel en términos de influencia en films posteriores y en el nivel de innovación que produjo en su momento. La mayor pega que ofrece es que, al contrario de las obras citadas más arrriba, esta película no ha envejecido tan bien. Nada bien, de hecho. Aunque comentaremos algunos detalles al respecto de su diseño de producción y sus efectos visuales, la "chicha" de la disertación va a centrarse en el argumento del film. La película es recordada especialmente como uno de los primeros alegatos ecologistas del cine, y en ese sentido, la misma contextualización extrema en la época de su realización que ha hecho que envejezca tan mal nos va a permitir analizar cómo ha cambiado nuestra sociedad al respecto del concepto de ecología y medio ambiente. Puede que alguno haya caído ya en que una película de reciente estreno y gran impacto mediático transmite  también un mensaje explícitamente ecologista: sí, efectivamente, se trata de Avatar, la última hipérbole futurística del director James Cameron. Lo cual brinda una oportunidad perfecta para hablar de ambas películas y reflexionar un poco acerca del cine de ciencia ficción y su influencia en la sociedad (y viceversa), y como aquí el que suscribe es dado a superenrrollarse cual hélice de ADN, he decidido hacerlo por partes. Así que para saber qué pueden tener en común estas películas separadas por 38 años de edad  y un abismo tecnológico,  tendréis que esperar a la siguiente entrada; mientras tanto, seguid leyendo para descubrir (o recordar) una de las películas más curiosas del género de ciencia ficción en la década de los 70.


jueves, 4 de noviembre de 2010

¡Jindetrés, sal! en los Premios Bitácoras 2010

No pensaba escribir acerca de los Premios Bitácoras 2010, pero tras comprobar que al parecer se toman bastante en serio dentro de la blogosfera (vamos, dentro de lo "serio" que pueda ser este compendio de espacios personales donde cualquiera puede escribir y divagar acerca de aquello que le plazca), me he decidido a comunicar oficialmente el puesto en que ha quedado nuestro humilde espacio internetil, al igual que han hecho otros blogueros cuyos espacios también han participado en esta movida, Las historias Eulerianas y El busto de Palas (por citar un par de ejemplos).

Primero, decir que estos premios son votados sin que exista candidatura, lo cual quiere decir que cualquier blog existente puede ser votado por cualquier persona. Claro, dado que la página de Bitácoras es más frecuentada por blogueros que además están indexados en ella, al final todo queda un poco "entre amigos", pero bueno, no deja de ser emocionante encontrarse entre los 50 primeros de TODOS los blogs de la categoría "ciencia" que existen (que son muchos, muchos más de 50). 

Resumiendo: empezamos sin aparecer siquiera en las primeras clasificaciones, de repente en cierto momento aparecimos en el puesto 41, y así seguimos ascendiendo hasta quedar entre los 25 finalistas en la posición... redoble de tambores... ¡23! Sí amigos, un logro increíble para este joven blog sin unos índices de visitas demasiado ostentosos, apenas una veintena de seguidores y  un número irrisorio de suscriptores. Está claro que algo de propaganda hicimos, (especialmente vía twitter), pero de cualquier modo no esperaba jamás encontrarme entre los grandes; mucho menos, detrás inmediatamente de Diario de un copépodo, lo cual es un gigantesco honor (ya que se trata, aunque el autor lo niegue, de un blog científico ejemplar, divertido, didáctico, original y con bastante renombre). Pinchando en este link podéis ver la lista completa de finalistas, muchos de ellos los tenemos enlazados por aquí pero hay muchos otros que se nos habrán pasado por alto y que seguramente serán de interés para los lectores jindetreseros. Hay que decir que finalmente el gato al agua se lo llevó el brutal compendio de científico-blogueros conocido como Amazings.es.

Así que he pensado que era de recibo agradecer públicamente todos estos votos, porque si gracias a este rollo de los premios llegan lectores nuevos al blog, habrá valido la pena. Al fin y al cabo, aunque suene manido, es cierto que esta página no sería nada si no fuera porque hay quien la visita, la lee y la comenta; por mucho que nos guste dar rienda suelta a nuestra demencia, siempre ayuda saber que hay alguien ahí esperando leerla, es bastante motivador. De modo que comprobar que además de los comentaristas habituales hay una serie de visitantes que se han tomado la molestia de votar por nosotros, ha sido toda una alegría. Siempre queda la sensación de que todo esto de la "red" se queda entre los mismos cuatro locos que se comentan, votan y enlazan unos a otros; pues sí, vale, es cierto, pero aunque sea pequeñita, no deja de ser una red que une a personas separadas física y temporalmente (¿dimensionalmente, tal vez?), gracias a unos intereses, aficiones e inquietudes comunes. No deja de ser bastante curioso, ¿no creéis?

No me resta más que volver a dar las gracias, y decir que aprovechando el empujón de motivación, nos ocuparemos de ahora en adelante de seguir mejorando para ver cómo quedamos el año que viene. Cuesta mucho sacar tiempo para materializar todo lo que a uno le gustaría plasmar en el blog, así que toda ayuda es bienvenida. Ah, y un agradecimiento especial a la compañera Consuela, que también ha apoyado la propaganda jindetresil además de conseguir un impresionante puesto número 16 en la categoría "Mejor Fotolog" para su genial colección de instantáneas llamada Con la suela en los talones.


En nombre del equipo editorial de ¡Jindetrés, sal! (es decir, servidor y Banchsinger, que se ha currado los dos últimos posts)...



Nadie mejor que Batablanca para recibir el galardón. 
Se le nota visiblemente emocionado.