viernes, 25 de abril de 2014

El baile de los Cromosomas


Lo he visto en cientos de fotos, en decenas de libros, en cochambrosos esquemas desde la escuela hasta el final de la carrera: La Mitosis, la coreografía de la división celular. Un baile asombroso. No importa cuantas veces lo hayas estudiado en aburridos soportes estáticos, cuando lo ves en vivo, casi llegas ha entender la majestuosidad de la vida.
File:Major events in mitosis.svg
Fuente

Por motivos de secreto profesional, entenderán que no les diga el porqué, pero un ayer, después de un experimento fallido, decidí aprovechar aquellas desahuciadas pero aún vivas células. Se me había  ocurrido una idea, pero para llevarla a cabo, primero tenía empujar a esas células al límite de su resistencia y al poderoso microscopio hasta el límite de su resolución. Si superaban la prueba, la primera piedra para un futuro experimento estaría puesta....


Sambodromo de Río (Cromatina)
Yo ya había visto cromosomas en vivo, vosotros también, ya los visteis el otro día cuando os enseñé aquellas grabaciones. Pero, aquella vez, los parámetros que usé para filmar esas células estaban más enfocados a adquirir una visión global de la división celular. Entonces solo pretendía poder seguir el derrotero de la cromatina de cada célula sin preocuparme de distinguir dentro de ese amasijo teñido rojo alguno de los 82 cromosomas que poseen de media los núcleos de las células HeLa. Sin embargo, esta vez quería ver el baile de cerca, lo más cerca y lo más claramente posible. Quería ver si la máquina que tenía entre manos era capaz me mostrarme al menos algunos de los bailarines con todo detalle. Quería ver si era capaz de seguir todos y cada aun de sus movimientos durante la exquisita danza. Ya había visto el Sambódromo, ahora quería ver a las Sambeiras.

Sambeiras (Cromosomas)

Hay un par de cosas a tener en cuenta. La primera es que el término Cromosoma se refiere a una macromolécula de ADN unida a una horda de proteínas que la organizan. Los llamados Cromosomas interfásicos se representarían con una I. Después de la replicación de esas moléculas de ADN, se usa la típica representación en X, que hace referencia al llamado Cromosoma metafásico. este último no es otra cosa que dos I gemelas unidas por el "centro" (Centrómero se llama el lugar por donde se unen). La segunda  cosa es que un cromosoma metafásico dentro de una célula viva sufriendo mitosis no se parece en nada a la típica representación en X que podéis encontrar por ahí. Os prevengo porque no quiero que os perdáis buscando cosas con forma de X imitando a Fred Aster, lo que veréis será más parecido a un unos bailarines de Break dance.



El kit de la cuestión para entender la coreografía está en saber que el bailecito puede dividirse en 4 grandes fases determinadas por los cambios de densidad que  sufre la cromatina a nivel global. Resumiendo mucho se podría decir que cuando una célula no está en el proceso de división (mitosis) se encuentra  en Internase. La Interfase vendría a ser  la "vida normal" de la célula. En ella la célula realiza todos los procesos metabólicos y fisiológicos para los que nació. En Interfase el núcleo esta completo y nuestros cromosómicos bailarines se encuentran en reposo, relajados, expandidos y en proceso copiado... pero cuando el copiado finaliza,  la célula necesita dividirse y empieza el baile.  En Profase, los cromosomas interfásicos despiertan de su relajado letargo y empiezan a condensarse, tensan sus músculos moleculares y el ADN que compone cada cromosoma pasa de ser una fofa y sedentaria macromolécula a una fibrada, ordenada y dinámica estructura. Según se van condensando, los Cromosomas interfásicos (I) gemelos (las  dos moleculas de ADN gemelas, copias exactas que se hicieron en Interfase por cada cromosoma) quedan unidos por su centro (centrómero) dando lugar al Cromosoma metafásico (X), la danza se acelera y con agitados y exaltados movimientos, los suntuosos bailarines se van alineando entorno a un plano imaginario que separa las dos mitades de la célula durante Metafase.  Cuando todos están alineados en un majestuoso equilibrio, los cromosomas hermanos, rompiendo su centrómero, se separan durante Anafase corriendo cada uno, todavía condensados, hacia polos opuestos de la célula. Al final de la Anafase y durante toda la Telofase los cromosomas se descondensan paulatinamente hasta alcanzar el mismo estado relajado que poseían al principio, en Interfase.    

 Aquí podéis ver la cromatina de una célula Hela pasando por las diferentes fases fases de la Mitosis. Recodad que aquí solo vemos el Sambodromo, la resolución no permite ver bailarines individuales.

Este es el fabuloso ritual, que se repite una y otra vez (en líneas celulares inmortales es la historia interminable) con un único objetivo: generar dos células hijas con el mismo número de cromosomas y exactamente la misma información genética. Claro está que la igualdad en el reparto no siempre se consigue. Por muy bien que se baile, que les pregunten a los Cherokee se siempre conseguían lluvia.



Bueno, pues eso, que a lo que venía era a mostraros de nuevo el vivo el baile, lo más de cerca que la tecnología a mi alcance me dejo grabar .


Ahí estaban, para los ojos legos en la materia, el tumulto embarullado de gusanos rojos, más que bailarines, parecen un grupo de seres enloquecidos bailando el Harlmem shake. Pero para el docto en la materia o para aquel que sea capaz de mirar el vídeo dos o tres veces, se verán claramente algunos cromosomas aislados; de dos a tres bailarines despistados, en la parte izquierda del núcleo más brillante que queda en la parte superior de la imagen, justo antes de su metafase. Este espectáculo que dura al rededor de una hora a fotograma cada tres minutos y muy justito de láser, era máxima resolución espacio-temporal que podía conseguir. Para ver con más precisión necesitaba más láser y fotogramas cada menos minutos, pero ya perdí la cuenta de las células que murieron valientemente bloqueas en una Profase sin fin con los bailarines desubicados, despistados y perdidos por los efectos perniciosos de tanta radiación en tan poco tiempo. Lo que había visto casi era suficiente, pero ni las células ni la magnífica máquina habían superado la prueba. Sin embargo aun albergaba un as en la manga: había más células en el incubador, un Pepino-microscopio aun más grande el el cuarto de al lado y más días que longanizas x 6,23x10^23




jueves, 10 de abril de 2014

Ensayo sobre la piscina (II): De rituales previos y gafas del Averno


" Oh vosotros los que entráis, abandonad toda esperanza "
Dante Alighieri, La Divina Comedia;
Infierno, Canto III, sentencia 9

PECADOS
Condenado para la eternidad realiza un triple salto del demonio. El jurado enloquece (fuente)

En este capítulo nos zambulliremos de lleno en el auténtico protagonista del presente ensayo: la piscina propiamente dicha. Una vez el intrépido individuo - al que denominaremos en este estado como prenadador - ha conseguido superar la prueba del vestuario, esa cámara estanca que separa el mundo civilizado del infierno azul, se encuentra en el umbral donde ya no hay vuelta atrás. Tímidamente, su pie enchancletado avanza y chapotea en el húmedo, resbaladizo y traicionero suelo que rodea el pozo de inmundicia líquida. Atónito, hace un barrido de 180º con la poca movilidad que el obligatorio profiláctico que corona su cabeza, envasándola al vacío, le permite. Y lo que su atribulado y a estas alturas totalmente desconcertado centro neurológico recibe, podría describirse fácilmente como una imagen sacada de la prosa de Dante Alighieri o extraída de una ventana hacia el Jardín de las Delicias de El Bosco.

PiscinaPetada